"Mi eterna contradicción"

Místicos | 26/10/2020

Y con el fulgor de esta luna sonrojada y danzante, alumbro un deseo de Dios.

De dicha ocurrencia, dos potencias colisionan en contradicción, la irreverente razón, con la majestuosa fe. En un mismo chispazo de tiempo y en una misma conciencia, se pugna por la verdad.

La razón queda de altanera. La fe, de infantil remiendo.

Sin solución aparente y en gozosa agitación, terminará otra oscura noche, sin vislumbrar faro ni costa alguna. Navegando sin rumbo, ingrávido entre dos tentaciones, la búsqueda continuará hasta el declive de mi aliento.

Confieso que tengo miedo.